Son 35 y cada una de ellas tiene su propia historia hecha en sonido, enmarcando la magnificencia y esplendor de Nuestra Catedral de la Cd de México.
Durante siglos, el repique de las campanas de la Catedral Metropolitana marcaron el ritmo de vida de los capitalinos, pues a través del “taÑir†daba cuenta de diversos aspectos como la hora del dÃa o eventos religiosos importantes, como la última visita del Papa Juan Pablo II a nuestro paÃs, dÃa en el que las campanas se dieron vuelo tocando sin parar.
Este acontecimiento ameritó que se colocara una nueva campana en las torres de la Catedral en su honor, llamada Juan Pablo II.
Bajo esta premisa, la idea de visitar el campanario de la Catedral se fue avivando entre nosotros, pues la Ciudad de México cuenta con un sin fin de alternativas para disfrutar de un fin de semana sin igual. Sin embargo, dos fueron los factores que influyeron en nuestra decisión: la ubicación y el costo.
A diferencia de otros viajes que hemos realizado, la visita al campanario no requiere más que de buena condición fÃsica, pues los 72 escalones del Siglo XVII que conducen a ellas, nos dejaron sin respiro. Y lo mejor, mejor de todo es que no se requiere de mucha inversión, sólo te basta con un boleto de metro y 12 pesos (costo de la entrada), aseguramos disfrutar de la historia que envuelve a las campanas, asà como de la vista panorámica que ofrece del Zócalo capitalino y del Templo Mayor, por mencionar algunos de los lugares que se pueden apreciar.
Una vez en las alturas descubrimos, gracias al guÃa Ãngel Miguel de León que la primera campana se instaló en 1578. Es asà como la “DoÑaâ€, “San Joséâ€, San Pedroâ€, “San Pablo†y la “Castigadaâ€, forman parte de las 33 campanas que suenan durante el aÑo, dependiendo del momento litúrgico del que se trate.
El tamaÑo y el peso varÃan, hay desde una hasta seis toneladas y con formas elÃpticas y ovaladas. Como mencionamos cada una de ellas no sólo tiene un nombre sino una historia y quizás la que más llama la atención es “La castigadaâ€, que debido a la falta de experiencia de un campanero que no tomó las precauciones debidas perdió la vida, mientras la balanceaba. Este accidente fue motivo suficiente para quitarle el badajo y amarrarla como una forma de castigo, penalización que de la que fue absuelta después de 50 aÑos. En el 2000 el Cardenal, Norberto Rivera, le otorgó el perdón y desde entonces cada domingo se escucha su repiquete.
Considerada como el primer monumento religioso de América Latina, la Catedral Metropolitana se edificó en 1573 y los trabajos de construcción se demoraron 240 aÑos. En esta obra participaron 16 arquitectos que dieron vida a cinco naves y 16 capillas laterales.
La estructura de la Catedral mide 59 metros de ancho por 110 de largo y tiene una altura de 60 metros en la nave central o cúpula.
Por más de cuatro siglos la Catedral ha resistido sismos, incendios y hundimientos, este último representa uno de los problemas más severos que enfrenta y que la han llevado a su restauración y gracias a este intenso trabajo, hoy nos regala de nuevo la maravilla de este edificio.
Huida Tips •   El campanario de La Catedral Metropolitana cuenta con 33 campanas. •   En la Torre Oriente se localizan 23 campanas y 11 en la Torre Poniente. •   Todas las campanas son hechas en México, fundidas en la calle de Moneda. •   El reloj de la Catedral cuenta con sonidos de campana que suenan automáticamente cada 15 minutos. •   Para tocar una campana se necesita de tres a cuatro dÃas.
VÃa: Huidas por México