El manantial de S. PellegrinoÒ es conocido desde el siglo XIII, cuando personas del norte de Italia iban de peregrinaje a la zona para restablecer su sentido de bienestar. Es así como San Pellegrino Terme adquirió su máximo esplendor a finales del siglo XIX, en pleno auge de la Belle Epoque, convirtiéndose en punto de reunión de aristócratas europeos que visitaban las “aguas milagrosas”. Más tarde, en 1899 se funda la compañía embotelladora S. PellegrinoÒ, siempre con vocación internacional, logrando que en pocos años el agua fuera reconocida mundialmente por su inconfundible estrella roja, símbolo de calidad y status, interpretando perfectamente el arte de vivir italiano.
